El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ratificó el triunfo de Pablo Lemus como el próximo gobernador de Jalisco. Con ello, quedan en firme los responsables de un tema sustancial como es la seguridad.
Contrario a la narrativa de los ejecutivos federal y estatal respecto de que vamos mejor en este tema, el 19 de septiembre pasado, el INEGI publicó la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE 2024), que se basa en información del año anterior.
De manera general, podemos decir que los 10 objetivos que persigue la ENVIPE se resumen en retomar las experiencias y percepciones que tiene la población respecto de la seguridad en su día a día, sus mayores preocupaciones y cómo se comportan las autoridades ante ello.
La ENVIPE muestra resultados a nivel nacional y de las 32 entidades federativas. Yo me centraré en los resultados para Jalisco.
Tanto a nivel nacional como estatal, los datos de 2023 muestran retrocesos con relación a 2022 porque las personas han sufrido más delitos, los denuncian menos y han tomado medidas para protegerse.
A continuación, retomo 10 resultados de la encuesta.Prácticamente 3 de cada diez hogares (un 29.1%) en Jalisco tuvo al menos una víctima del delito en 2023. Este porcentaje es mayor a la media nacional que es de 27.5%.
Tanto el número de víctimas como la tasa de delitos subieron y esta es la primera ocasión en los 14 años que se ha publicado la encuesta en la que los delitos sufridos por mujeres en Jalisco son superiores a los de los hombres. Para 2023, la tasa de víctimas por cada 100,000 mayores de 18 años fue de 24,390 para hombres y 25,142 para mujeres. En sentido inverso, el 86.3% de las personas agresoras fueron hombres, el 6.1% mujeres y en un 5.2% hubo una combinación de ambos.
Cuatro de los delitos medidos por la encuesta aumentaron en 2023: extorsión, robo total o parcial del vehículo, amenazas verbales y robo en casa habitación. El único delito que mostró una disminución fue el de robo o asalto en calle o en transporte público.
La encuesta señala que, de los 2’000,425 delitos estimados en 2023 para Jalisco, la víctima estuvo presente en 47.3% de los casos y en uno de cada cuatro delitos (25%) sufrió una agresión física.
La ENVIPE señala que “El costo total a consecuencia de la inseguridad y el delito en hogares representó un monto de 26.5 mil millones de pesos, lo cual equivale a un promedio de 9,325 pesos por persona afectada […]”. Casi el 74% (73.9%) de esos costos fue a consecuencia del delito sufrido, mientras que el 24.5% fue para invertir en medidas preventivas, como el cambio de cerraduras, puertas o ventanas; la colocación de candados, rejas, bardas; acciones conjuntas entre vecinos; o la compra de perros guardianes.
En 2023, la cifra negra o subregistro (que es la sumatoria de casos que no se denuncian y en los que, aun siendo denunciados, no se abrió una carpeta de investigación) fue de 91.6%. Es decir, nueve de cada 10 delitos en Jalisco no fueron denunciados o investigados, lo cual puede explicar la sensación de impunidad que vivimos en el estado. Más aún: en el 62.6% de los casos las personas no denunciaron por causas atribuibles a las autoridades.
Hubo un retroceso en los delitos denunciados: en 2022, en ocho de cada 10 casos (80.5%) se inició una carpeta de investigación, mientras que en 2023 ese número cayó 10% al ser iniciadas investigaciones en siete de cada 10 denuncias.
La seguridad sigue siendo la principal causa de preocupación de quienes residimos en Jalisco, seguida del aumento en los precios, la salud, la escasez de agua, la corrupción, el desempleo, la pobreza, el narcotráfico, la falta de castigo a los delincuentes, la educación y los desastres naturales, respectivamente.
Los lugares que siguen generando mayor inseguridad son los cajeros automáticos (donde siete de cada 10 personas -69.6%- se sienten inseguras), los bancos, la calle, la carretera, el transporte público y el parque o centro recreativo, respectivamente.
La policía de tránsito lidera la percepción de autoridad estatal más corrupta, seguida por los jueces, la policía municipal y la fiscalía.
Evidentemente, para tener una mayor comprensión sobre la seguridad es necesario revisar otros instrumentos y bases de datos. Sin embargo, como lo muestra la ENVIPE, hay mucho camino para las autoridades entrantes, tanto municipales, estatales y federales, para hacer de nuestro país un lugar más seguro.
Por: María Alejandra Nuño Ruiz Velasco
* Directora del Centro Universitario por la Dignidad y la Justicia Francisco Suárez, SJ (CUDJ)